jueves, 19 de julio de 2007

cansina (h.l.azul 34)


¿Por qué mi vida parece más importante
que cualquier suceso que haya ocurrido jamás?
Karen Blixen
Será por eso que leí, que las mujeres somos incapaces de escribir de algo que no sea sobre nosotras mismas. Ya sé que es una idea extremadamente misógena. Pero a mi me llegó. Yo soy un poco demasiado asi.
Una vez en Plaza de Armas
- ¿porqué quieres ser escritora?
- no sé, pero tengo que mejorar bastante.
- ¿crees que tengas algo que decirle al mundo?
- mmm. creo que sí.
Ahora creo que no. Creo que el mundo ya lo sabe todo. Como no sabemos nada hacemos cientos de ideologías tratando de saciar nuestras dudas. Clara dice que escribo porque me canso de hablar y cuando ya no hay quien me escuche torturo al ordenador. Podría ser. G. dice que escribe porque ahí dice todo lo que no habla. Imprime las ideas de los momentos de silencio. Yo aún no lo sé. Escribir por escribir. Para no sentir que el cerebro se está secando. ¡Lubricar! De alguna forma hay que hacerlo ¿no Catalina? Quizás porque en la vida real, no se que sea eso, no me atrevo a hablar así. ¿puede ser? Porque hay que abrir el corazón y la imaginación aunque sea sólo unos momentos al día, aunque los ordenadores no abracen. Ya sé que esto de los blogs es una tontería.
- Tengo un bacío
- Primero aprende a escribir vacío, llénalo con vodka y un blog. En tu caso será whisky, por supuesto.
Si, ya todos tenemos blogs, y nos entretenemos un buen rato. Pero qué tristes somos. Ya no hay viernes de títeres, ni de bailes de Geisha. Pensaba que la tristeza sólo me estaba consumiendo a mi. Ahora veo en sus ojos que nos ha ido consumiendo a todos. Es peor ver que la tristeza en los ojos de ellos que en los míos.Cuando se lo digo al gran niño de los ojos a media asta, para acompañarme, dice que no hay nada por qué alegrarse. Con eso se me sube la gastritis y de nuevo el corazón envejece una década más. "He envejecido diez años esta noche"
Maldigo a Chéjov. Habría que beatificarlo.
Después mi mente sí, pero mi cuerpo no aguanta tantas emociones, entonces me da fiebre y diarrea. Es el dolor. Como las arrugas en mis ojos, a los veintidos. No importa que sea una pseudociencia, me gusta la morfología. No me asusto con los ruidos de las ambulancias. El gran niño de los ojos a media asta se petrifica. Además de no tenerle miedo a la muerte, estoy acostumbrada al ruido, externo e interno. Supongo que él no. Por eso se paraliza. Por eso no puede escucharme cuando pasa el metro. Por eso no me lee, porque soy muy ruidosa. Aferrándome a las cazuelas para que no se me caiga el gato, después el gato salta y todas las cazuelas caen. No lo puedo evitar.
Nunca he podido callar mis penas. Tampoco he dejado de cargarlas.
Bueno como hoy nadamás estoy baboseando y no logro escribir algo en forma me piro.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Maria Jose! escribes para q se me ponga una sonrisa en la cara cuando lo leo, para q a las 5 de la mañana cuando llego a casa despues de escuchar cientos de tonterias,cuando no puedo dormir y me pongo a ver la teletienda.. Tenga algo mucho mejor q hacer: LEER Para lubricar nuestros cerebros, para enseñarnos, para q nos enamoremos de tus personajes... y por mil razones mas q te dire, xq no kiero ser intensa! jaja

Mañana salimos!!

Anónimo dijo...

Es la necesidad que tenemos de comunicarnos, de saber que en algùn
lado hay alguien que comparte nuestros sentimientos,nuestras ideas en fin que no estamos solos.

Anónimo dijo...

Porsupuesto que estamos solos. En totalidades monstruosas. Tuve un profesor y profeta que me decía: "Todos escribimos pero pocos hacemos literatura" Tú empiezas a hacer literatura. La cuestión es que la escritura proviene del conocimiento, experiencia y lectura. Argumentamos con retórica falsa nuestros peores miedos, nuestras máximas epifanías, para que al final despiertes en un lunes de poco sol y te des cuenta de que Faulkner tenía razón: "Nunca terminarás de intentarlo"...Chéjov hizo que su personaje ganará en un casino y luego se dispara en su habitación de hotel. Eso! la caricia de romper con tus deseos para después matarlos a modo de personaje. Fluyes como un nenúfar en península del viejo cometa. Sigue surfeando.